Animadeba, Animakom FEST, Animabasauri-Animabasque, Animatic. No es casualidad encontrar cuatro festivales de animación en unos pocos kilómetros, ya que el País Vasco cuenta con una gran tradición en dicho ámbito. Ha transcurrido medio siglo desde que el artista Jose Antonio Sistiaga presentara ‘De la luna a Euskadi’ (1968), un cortometraje experimental pintado directamente sobre celuloide. Con el transcurso de las décadas, la experimentación inicial dio lugar a películas de ficción para el público más pequeño de la casa. Juan Bautista Berasategi fue una figura imprescindible en los albores del cine de animación comercial y títulos tales como ‘La calabaza mágica’ (‘Kalabaza tripontzia’, 1985), ‘La leyenda del viento del Norte’ (‘Ipar haizearen erronka’, 1992, Maite Ruiz de Austri, Carlos Varela, Juan Bautista Berasategi) o ‘Megasónicos’ (‘Megasonikoak’, 1997, Javier Gonzalez de la Fuente, Jose Martínez Montero) sentaron las bases de la animación contemporánea.
El estallido de la animación vasca
16 Abr 2024Sin embargo, en los últimos años, junto a historias más maduras y profundas, ha llegado el reconocimiento internacional y se puede decir que la animación vasca vive una especie de estallido. No existe una razón principal, más bien la causa se encuentra en la suma de múltiples factores. Por un lado, una interesante fórmula de colaboración y coproducción que sirve para compartir riesgos y costes y aumentar el tamaño del mercado potencial. En este sentido, las productoras merecen palabras de elogio, ya que es fundamental fomentar estas colaboraciones en muchos casos son imprescindibles para sacar adelante las películas. El éxito que subyace a numerosos títulos se debe, en gran medida, al enorme trabajo de algunas productoras y grupos del País Vasco: Abra Produkzioak, Dibulitoon, Uniko, Somuga Produktora, Lotura Films, Baleuko, Atxur Animazio Taldea, etc.
Junto al planteamiento de propuestas para el público adulto y narrativas de calidad, cabe destacar que se tratan temas de debate tales como la política, el feminismo, la soledad… Tanto por la problemática que abordan como por las preocupaciones que provocan, son películas nos dejan huella después de haberlas visto. Estrechamente relacionado con todo ello, también se puede analizar la forma en la que se transmiten dichos mensajes. A la hora de dar movimiento, forma y sonido a estos dibujos se ha producido un desarrollo muy notable, y en los últimos años se ha dado paso a diferentes técnicas. Mientras que las primeras obras de Berasategi, así como algunas de las posteriores, se encontraban más próximas a la animación tradicional o a los dibujos animados tradicionales, en las producciones actuales se emplean todo tipo de recursos: stop motion (animación creada con la combinación de fotos y manipulación de objetos reales), animación por ordenador o rotoscopia, entre otros. Todos estos trabajos han sido presentados a nivel internacional y han recibido el reconocimiento de la crítica y de varios festivales. Si introduces todos estos elementos en la misma coctelera, encontrarás el motivo del estallido.
He aquí algunos de los éxitos vascos de animación de los últimos años:
‘Gartxot’ (2011, Asisko Urmeneta, Juanjo Elordi). Podría decirse que la primera película de esta lista, aunque no haya obtenido un gran éxito internacional ni premios, supone una primera muestra del aumento de calidad dentro de la animación vasca. Se trata de una leyenda medieval situada en Navarra. Se basa en el libro ‘Gartxot, bardo de Itzaltzu’, escrito por Arturo Campión en 1917. El bardo Gartxot relata a modo de canto la situación del País Vasco a principios del siglo XIII. Tiene un hijo llamado Mikelot, un muchacho de hermosa voz. Los frailes de Roncesvalles descubrirán la fascinante voz del joven y lo llevarán a su casa cural en contra de los deseos del niño y sus padres. Destaca la música de la película: Benito Lertxundi se encargó de añadir sus melodías a este relato.
´Psiconautas’ (2015, Alberto Vázquez, Pedro Rivero). Este excelente trabajo, que emplea recursos bastante novedosos, obtuvo más de 40 premios en festivales internacionales, entre ellos el Goya y la nominación a mejor película de animación en los European Film Awards. ‘Psiconautas’ narra la historia de Birdboy y Dinki, dos adolescentes que discuten si huir o no de una isla afectada por una catástrofe ecológica. Bridboy quiere vivir aislado y Dinki, por su parte, sueña con iniciar un peligroso viaje y mantiene la esperanza de que Birdboy le acompañe.
‘Un día más con vida’ (‘Another Day of Life’, 2018, Raúl de la Fuente, Damian Nenow). Relato autobiográfico de Ryszard Kapuściński. Narra los últimos días de Angola como colonia portuguesa en 1975 y las terribles consecuencias de su proceso descolonización: la guerra civil que arrasaba la región hasta hacía poco. La sorprendente técnica de animación Rotoscopia, basada en una técnica patentada por Max Fleischer en 1917, en la que se realiza un juego de imágenes dibujadas sobre una serie de imágenes obtenidas por grabación, se compagina brillantemente con imágenes reales, documentales, diversas lenguas, sueños... Uniendo todo ello, Raúl de la Fuente y Amaia Remírez completan una excelente labor de dirección y guion.
‘Black is Beltza I & II’ (2018-2022, Fermín Muguruza). Es una producción transmedia brillante. Este doble trabajo, basado en la novela gráfica del mismo nombre, ha sido muy importante en el ámbito de la animación vasca. El cómic ´Black is Beltza´ fue creado por el músico Fermin Muguruza, el escritor Harkaitz Cano y el dibujante Jorge Alderete, y posteriormente ha servido de base para la película. Obtuvo los galardones al mejor diseño de sonido y la mejor banda sonora original en los Premios Quirino de la Animación Europea y el premio a la mejor película de animación en el Festival Internacional de Cine de Monterrey. Ambas películas están repletas de cientos de referencias y reúnen todas las obsesiones del músico.
‘Unicorn Wars’ (2022, Alberto Vázquez). Una magnífica y cruel película antibelicista, realizada en coproducción vasca, gallega y francesa. El cineasta Alberto Vázquez, utilizando como excusa la lucha entre unicornios y osos de peluche, lanza una profunda reflexión política y psicológica. Detrás de este trabajo se encuentra la productora bilbaína Uniko, creada en 2009 por Iñigo Gómez e Iván Miñambres, que ha producido películas de animación, anuncios y proyectos de comunicación. Cabe destacar el trabajo que están realizando en los últimos años y su repercusión internacional.
‘El sueño de la sultana’ (2023, Isabel Herguera). Basada en un cuento feminista homónimo, el trabajo de animación realizado por la donostiarra Isabel Herguera resulta fascinante. El cuento original fue escrito por Rokeya Hussain y publicado en la India en 1905. En él se describe un mundo utópico e imaginario en el que gobiernan las mujeres. El trabajo artesanal que hay detrás de este filme es excelente. El Centro Internacional de Cultura Contemporánea Tabakalera de San Sebastián acoge numerosas exposiciones y eventos; entre otros, en 2023 se organizó una exposición centrada en el proceso creativo de esta película y dividida en varias secciones, como si fuera el estudio del artista. Así se abordó la complejidad de cada una de las imágenes que componen la película. Asombroso.
‘Robot Dreams’ (2023, Pablo Berger). La última parada de este recorrido es esta magnífica obra dirigida por el bilbaíno Pablo Berger y respaldada por la productora navarra Lokiz Films. Basada en la célebre novela gráfica de Sara Varón, narra la historia de Dog, un perro solitario que vive en Manhattan. Para acabar con su soledad decide construir un robot que será su nuevo amigo. Es una joya sin diálogo. Ha sido nominada a mejor película de animación en los Oscar junto a los gigantes GoyDreamworks, Marvel, Pixar y Ghibli.
La labor de hormiguita que todos los nombres mencionados (y los que no se han mencionado) realizan en el día a día permite concluir que la repercusión y el éxito que la animación vasca está alcanzando a nivel internacional no ha sido fruto de la casualidad. Las semillas sembradas durante muchos años siguen floreciendo y cuentan con raíces sólidas y estables. La animación vasca tiene un gran futuro por delante y esto no es más que el inicio del estallido.